Del 3 al 11 de Octubre de cada año (y a veces se extiende hasta el día 12 y un chin más) los 650 kilómetros cuadrados del municipio de Cevicos celebran sus fiestas patronales.
Cada año, antes de las festividades, se asoma el fantasma de la incertidumbre, la angustia de saber a ciencia cierta si las patronales van o no van, el tema de si el Comité Organizador se conformó, o bien, la duda de si una vez conformado queda suficiente tiempo para organizar una actividad a la altura de las circunstancias, como los cevicanos lo merecen. Eso pasa siempre por esos lares, como también son típicas las controversias con la iglesia católica, que más adelante (en otro post) comentaremos.
Para entrar en materia, las festividades en honor a la patrona del municipio, la Virgen Del Pilar, iniciaron el pasado domingo y habían discurrido de manera "muy fría", a decir de la gente, lo que pudimos constatar en la noche del sábado. Se observaba a mucha gente hormigueando por el parque central entre venduteros de chucherías, frituras, juegos de azar y casetas de expendio de bebidas alcohólicas, pero no hubo ninguna actividad oficial formal en tarima para el deleite del público presente.